ASI es la organización no gubernamental de base comunitaria más grande en la isla a favor de la lactancia, alimentación infantil segura y justicia reproductiva y alimentaria para personas en la etapa de gestación (incluyendo la pérdida perinatal y aborto electivo), parto, puerperio y posparto. Cuando decimos “la más grande” es por la cantidad de voluntarias y la población servida, y no por nuestro presupuesto. Nuestros servicios cubren el transcurso de los primeros mil días (desde la concepción hasta los dos años de edad), servicios directos de acompañamiento de aborto, pérdida, parto, lactancia/alimentación infantil, consejería, manejo clínico, educación, capacitación y certificación.
Nuestra misión es
1. Trabajar para la seguridad y justicia durante los mil días para gestantes, parturientes, lactantes, infantes y toddlers, a través de la preparación para, respuesta a, y recuperación de emergencias y las condiciones de vida que crean inequidad social e inestabilidad económica. Nuestro enfoque es la toma de decisiones informadas en las prácticas de gestación, aborto electivo y espontáneo, parto, posparto y alimentación infantil segura incluyendo la lactancia, reducción de riesgo con el manejo de leche humana extraída, manejo de las leches infantiles comerciales, la alimentación complementaria y la higiene del equipo de alimentación.
2. Capacitar a líderes y residentes comunitarios como promotores de salud, trabajadores de parto y especialistas en lactancia y alimentación infantil segura a través de talleres, conferencias, certificaciones, práctica clínica, y mentoría. Estos servicios son accesibles según la capacidad de las personas que buscan servicios.
3. Combatir sistemas de opresión que limitan la capacitación y el acceso a servicios equitativos basados en las diversidad funcional y emocional, clase social y económica, creencias, educación, estado civil, expresión sexual, sexualidad, género, geografía, origen nacional y estado inmigratorio, sexo, raza, y otras construcciones sociales de marginación deliberada.
Necesitamos donaciones económicas para continuar ofreciendo estos servicios esenciales y promover la equidad en salud y derechos reproductivos en nuestras comunidades.